Las cuentas del voto útil

Se ha hablado mucho en las últimas elecciones sobre el voto útil. Mucho y muy mal, porque la realidad era evidente.

Puesto que ni Vox ni Sumar iban a desaparecer y se encuentran en la franja de mayor incremento de la utilidad del voto (entre el 10% y el 20%), el voto más útil era a estos partidos.

La lógica subyacente es sencilla. Hasta llegar al 10% en un territorio, el voto apenas reporta escaños. En los partidos que pasan del 20% del voto cada 1% nacional se traduce en unos 4 escaños aproximadamente.

Entre el 10% y el 20% se pasa de tener mucho voto inútil (que no reporta escaños) a que todo el voto sea útil (de 4 escaños por cada 1%). Es decir, votar a un partido está en esa franja produce el doble, ya que no es sólo aporta el propio voto sino que hace que tenga rendimiento el voto que hasta entonces resultaba inútil.

No tiene mucho misterio y ya lo advertía Luis del Pino antes de las elecciones: el voto útil era el voto a Sumar y a Vox, que están en la franja del 10% al 20%.

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Vayamos ahora a la lógica de los partidos políticos.

El PP, intentó compaginar dos objetivos contradictorios: conseguir la mayoría con Vox y el gobierno sin Vox. Esa parecía ser la tarea encomendada a Feijóo. Derogar el sanchismo manteniendo a España sometida al globalismo, impidiendo el cuestionamiento de sus dogmas. Sólo hay que repasar los medios globales, cómo advierten frente a Vox pero no frente a partidos criminales como Bildu, ERC y Junts, o frente a un partido de claras afinidades bolivarianas como Podemos-Sumar.

El PSOE, en cambio, siempre apoyó a Sumar. Incluso, en el debate a tres, Sánchez (PSOE) cedía claramente la iniciativa a Yolanda (Sumar).

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Está claro que el PSOE jugaba con ventaja. La estrategia globalista no le obligaba a erosionar a quienes luego serían sus apoyos. Ya que la fragmentación de España es parte de la hoja de ruta globalista. Y la promoción del izquierdismo global, también.

Pero el PP sí se veía obligado a erosionar a Vox, a quien el globalismo equipara a Meloni, Morawiecki, Trump… sus enemigos.

Esta diferencia ha sido la que ha determinado el resultado agridulce de las elecciones. El PP ha ganado, pero el bloque de izquierda y secesionistas tiene la mayoría y Sánchez será el presidente… por cinco escaños. Cuando la pérdida de utilidad del paso de voto de Vox a PP se ha traducido en unos nueve escaños menos al bloque de la derecha.

Así que tarde o temprano el PP tendrá que decidir a quien sirve. No se puede servir a Dios y al diablo a la vez. A los españoles y al globalismo.

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P.S.1 (29 Julio 2023) La cuentas de esta entrada del blog no tienen el cuenta el cambio de un escaño de PSOE a PP tras incorporar el voto CERA, con lo que el PP queda en 137 escaños.

P.S.2 (10 Agosto 2023) Dicen los entendidos que el trasvase entre PP y Vox no ha sido importante en neto. Que la bajada del % de voto a Vox ha tenido más que ver con la abstención. Lo pongo como curiosidad, no creo que afecte al fondo de mi análisis. El ataque de medios y políticos de derechas a Vox es un ataque al voto más útil contra Sánchez ya que es el que más escaños reporta al permitir aprovechar un voto que ya existe y que está en el límite de dar lugar a escaño o no.