La batalla entre Podemos y Sumar no es una lucha de egos sino una lucha de dueños. Uno bolivariano venezolano, el otro globalista franco alemán. Por eso ninguno puede ceder, porque es aceptar desaparecer.
Para reconocer la mano venezolana sólo hay que fijarse en los inicios de los dirigentes de Podemos. Iglesias, Monedero, Errejón… todos pasaron por una formación con la dictadura de Chávez.
Para reconocer la mano francesa tras Sumar sólo hay que fijarse en cómo El País, de propiedad francesa a través de Oughourlian, batalla a su favor.
Hay quienes piensan que este enfrentamiento entre Sumar y Podemos es por Irene Montero y su mala imagen desde la ley solo sí es sí. Porque resta voto en vez de aportarlo. Pero la ley sólo sí es sí se aprobó en agosto de 2022. Sumar se registró antes, en mayo de 2022. No casa.
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Podemos fue apoyado en su día por Francia y Alemania. Cuando satisfacía una función que les interesaba: presionar al PSOE para que aceptase aliarse con bolivarianos y secesionistas. Pero ya se consiguió y ahora intentan retomar el control de la izquierda, que no dependa de Venezuela.
Francia y Alemania quieren controlar toda la izquierda española, no sólo del PSOE.
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Es similar a lo que Francia y Alemania hicieron con Cs, que se usó para acabar con UPyD (que no se les sometía) y erosionar a Rajoy en beneficio de Sánchez.
Una vez se lograron ambas cosas Cs perdió su utilidad para ellos y quedó sin apoyo. Una pena que Cs se dejase manipular así, tentados con llegar al gobierno. Cumplía una función muy necesaria como izquierda no nacionalista.
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Política de garaje 
Un comentario sobre “Sumar y Podemos: Francia y Alemania vs Venezuela”