Teatrillo de enredo y del absurdo.
Puigdemont (dice): no toleraré que mis derechos sean cerdeñados por el Estado Español.
Mientras piensa: si me entregan a la Justicia española, durante dos años acapararé portadas y al final le indultarán. No será tan duro, con constantes permisos penitenciarios. Así capeare esta etapa de pacto de ERC y Sánchez contra nosotros y luego tendré además libertar total de movimiento. Lo único, hay que hacer que no se note que lo quiero, tiene que poder venderse como una crueldad contra Cataluña .
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Junqueras: me temo que esto va contra la mesa de negociación entre ERC y Sánchez.
Y con la comida no se juega, en esa mesa está conseguir un predominio estable sobre el entorno de la antigua CiU.
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Sánchez: es indultante insinuar que no hará cumplir con la Justicia.
Si viene, serán dos años de sufrimiento extra en imagen. A los avances nacionalistas que acordemos en la mesa con ERC se añadirá la inacción ante los constantes desplantes que sin duda me hará Puigdemon. Y luego el indulto cerca de la campaña electoral. Mejor evitar que venga, pero que no se note o me dirán que obstruyo a la justicia… también con esto.
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El resto miramos el teatro sin esperanza ya de que se tomen en serio la Justicia. Tan sólo intentando adivinar el truco y pensando que quizá está vez no sea en realidad muy difícil de adivinar.
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Política de garaje 